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La dispareunia es un trastorno sexual que se caracteriza por la presencia de dolor o malestar durante las relaciones sexuales. Puede afectar tanto a hombres como a mujeres, y puede tener un impacto significativo en la calidad de vida y en las relaciones íntimas de quienes lo experimentan. La valoración y tratamiento adecuados de la dispareunia son fundamentales para brindar alivio y mejorar la vida sexual de las personas afectadas.
En la valoración de la dispareunia, se lleva a cabo una evaluación exhaustiva que incluye una historia clínica detallada, un examen físico y, en algunos casos, pruebas diagnósticas adicionales. Es importante identificar los factores físicos y psicológicos que pueden contribuir al problema, como la presencia de infecciones, enfermedades ginecológicas, traumatismos previos, cambios hormonales o aspectos emocionales como el estrés o la ansiedad.
Una vez que se ha realizado una evaluación completa, se puede diseñar un plan de tratamiento individualizado para abordar la dispareunia. Este plan puede incluir diferentes enfoques terapéuticos, como terapia física, terapia sexual, terapia de pareja, medicamentos o una combinación de estos. La terapia física puede incluir ejercicios de relajación, técnicas de respiración, masajes o terapia manual para aliviar la tensión muscular y mejorar la lubricación vaginal. La terapia sexual y de pareja puede ayudar a mejorar la comunicación, reducir la ansiedad y explorar diferentes técnicas sexuales que sean cómodas y placenteras.
Además del tratamiento, es fundamental brindar apoyo emocional y psicoeducativo a las personas que experimentan dispareunia. Esto puede incluir información sobre el trastorno, consejos para manejar el dolor, estrategias de afrontamiento y asesoramiento para mejorar la comunicación y la intimidad en la relación de pareja.
Fisiosexóloga
